martes, 24 de marzo de 2015

Pablo Laso, Real Madrid y una cuestión de gustos

Poco queda por decir del entrenador del Real Madrid de Baloncesto que no se haya dicho ya, y más tras un excelente artículo de JotDown escrito por Guillermo Ortiz sobre la figura del técnico vitoriano, pero ante la semana "decisiva" en la que nos encontramos nos parece más que necesario recordarle al aficionado la situación en la que se encuentra el equipo y refrescarle la memoria a aquellos que, como dijo una persona sabia hace poco, hablan sin saber de historia.

Pablo Laso siempre ha defendido al Real Madrid / ACB Photo


El Real Madrid, a día 24 de marzo de 2015, es campeón de la Supercopa de España, la Copa del Rey, segundo clasificado en la Liga Endesa y está clasificado para los Playoff de Euroliga. Cualquier entrenador que hubiera conseguido semejantes logros a estas alturas de la temporada tendría garantizada la continuidad en su club, pero al hablar de Pablo Laso la cosa cambia. El equipo blanco estaba (y está) realizando un 2015 excelente, con un balance de 22 victorias y 3 derrotas, pero el "aficionado" solo ve dos derrotas dolorosas ante Panathinaikos y UCAM Murcia, y yo les recuerdo algo desde estas líneas: esto no es fútbol, aquí no gana el que vaya primero en la Liga a final de temporada.

ACB Photo / J.Bernal
Tras la derrota ante el equipo murciano, muchos se echaron las manos a la cabeza, viendo al equipo "en crisis", e incluso se pudo leer en Twitter que Pablo Laso no tiene mano dura. ¡Señores, Pablo Laso es el nuevo Ancelotti! ¿Acaso hace falta recordar el que probablemente sea el mejor tiempo muerto en los últimos años en la competición española? Sí, lo protagonizó Pablo Laso, con una de sus famosas "lasinas", ante el Caja Laboral el 31 de mayo de 2012. ¿Y recuerdan lo que pasó? El Real Madrid reaccionó, ganó el partido y la serie, y alcanzó la final. Una muestra de quePablo Laso es necesario en este equipo.

Rescatando una cita del artículo que mencionábamos al comienzo,Pablo Laso vino a hacerse cargo del Real Madrid, un equipo sin moral, un equipo que no sabía lo que era ganar al Barcelona. Un equipo en el que Sergio Rodríguez no era nadie, e incluso Felipe Reyes no tenía peso alguno, y estaban más fuera que dentro (¿se imaginan ustedes al actual equipo sin Sergio Rodríguez ni Felipe Reyes? Yo tampoco). Y lo transformó en un equipo ganador, un equipo con orgullo, un equipo digno de llevar el escudo del Real Madrid por media Europa. La situación de Pablo Laso es una cuestión de gustos, pero muchos han olvidado lo que era el Real Madrid de Baloncesto antes de su llegada, y lo que es hoy.

Una afición de verdad / Imagen de Virginia Pacheco, Planeta ACB
Se acercan dos partidos importantes, el viernes ante Maccabi Electra y el domingo ante Movistar Estudiantes, y el Palacio tendrá que meter el primer punto en ambos encuentros, y estamos seguros de que no meterá 1 sino 2, porque si Pedro pide que el Palacio ruja, el Palacio ruge, y si los Berserkers llaman al "Fondo Norte", estos devuelven la llamada. Ésta es la verdadera afición, la que no duda de su equipo ni entrenador, la que sufre con ellos en las derrotas y los que celebran cada victoria como si fuera la última.

Nosotros no confiamos en Marjanovic, confiamos en Salah Mejri. No confiamos en Pau Ribas, confiamos en Facundo Campazzo. No confiamos en Tavares, confiamos en Ioannis Bourousis. Confiamos en Sergio Llull, Sergio Rodríguez, KC Rivers, Jaycee Carroll, Rudy Fernández, Andrés Nocioni, Jonas Maciulis, Felipe Reyes, Gustavo Ayón y Marcus Slaughter. Confiamos en Pablo Laso, Zan Tabak, Chus Mateo, Juan Trapero y todo el cuerpo técnico. Confiamos en nuestras cheerleaders y confiamos en la afición. Confiamos en este equipo.

Redactado por: Álvaro Rodríguez || @alvaro_1301

1 comentario:

  1. "Solo las personas que viven con verdadera pasión y amor este deporte, pueden escribir así.
    Enhorabuena Alvaro"

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